15 de diciembre de 2022
Los medios de comunicación occidentales, salvo los alemanes, están ignorando clamorosamente la entrevista del semanario alemán Die Zeit a Ángela Merkel, publicada el 7 de diciembre. En Rusia, sin embargo, las declaraciones de la excanciller han suscitado reacciones al más alto nivel político, además de ocupar gran espacio en sus medios, censurados por Occidente. ¿A qué se debe esta disparidad de reacciones? ¿Por qué los medios de aquí ocultan lo que acapara la atención en Rusia? Muy sencillo: porque las declaraciones de Merkel dejan en mal lugar a Occidente y por eso conviene enterrarlas. Analicemos qué es lo que ha dicho la excanciller, cuáles han sido las reacciones en Rusia, y la opinión de algunos analistas al respecto.
En la larga entrevista, cuyo texto completo puede descargarse aquí, Ángela Merkel afirma que “el acuerdo de Minsk de 2014 fue un intento de darle tiempo a Ucrania. También aprovechó este tiempo para fortalecerse, como puede verse hoy. La Ucrania de 2014/15 no es la Ucrania de hoy. Como se vio en la batalla de Debaltsevo a principios de 2015, Putin podría haber invadido fácilmente en ese momento. Y dudo mucho que los países de la OTAN pudieran haber hecho tanto como hacen ahora para ayudar a Ucrania”.